Ser poeta es muy fácil
Basta tomar una palabra dócil
Hacerla pasar por la sangre
Que absorba todo lo que siento
Y luego sacudirla
Hasta enfurecerla
Y que salpique con la sangre las paredes
Y las caras de quienes me rodean
Para contaminarlos con mi alegría y mis pesares
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario